Genesis de la idea de Dios

Seminario mayor de filosofía San Luis Gonzaga diócesis de Matagalpa 

II filosofia 

Teodicea 

Docente: Mcs. Saluma Centeno 

Elaborado por: Michael Morales Sevilla

Matagalpa 19 de Agosto 2021

 La génesis  de la idea de Dios en el hombre 

La  génesis  de  la idea de Dios en el hombre, es por tanto una mera forma de generar  una cuestión  existencial  del hombre  por desear saber, como cree en Dios. Por ello, consultando a Juan de Sahagún  Lucas y apoyado por Locke, el empirista  y el doctor  angélico, propongo que esa génesis  se debe a un efecto causado  por Dios, una búsqueda  del hombre, por conocer, y una manera de buscar repuestas, más razonables, y es por ello que no propongo un solo argumento  en dicha temática, ya que no es propio quedarse en solo lugar, es bueno avanzar y seguir buscando, sin ser sedentario en una idea.

Ante la las cuestiones  sobre de cómo se da la génesis de la idea de Dios en el hombre, se puede pretender  decir que, esa idea es connatural  en el hombre y por lo tanto  es evidente por si mismo  en el hombre. Por tanto Sahagún dirá: no es lo mismo indagar las razones que inducen al hombre  a plantearse  el problema  de Dios  que buscar  los orígenes  de su idea en la humanidad. El origen de la idea en el hombre  de Dios, no es debido a causas externas. (Juan de Sahagún Lucas). Sin embargo,  es curioso  que la idea de Dios, sea bastante  similar  a la forma en que el hombre  busca repuestas de algo que ya él tiene, ciertos conocimientos  previos, como lo llega a proponer  Sahagún, es probable  que esa idea sea más  bien de una probable  posibilidad, como lo afirma el mismo  Sahagún: más  que  una  cuestión  de hecho, se trata de una  posibilidad. (Juan de Sahagún Lucas).  Pero es esa misma búsqueda  del hombre, por conocer como es que esa idea de Dios está impresa  en él mismo, lo cual haría pensar y buscar como aquel, que a pesar de que ya sabe  algo no se queda con lo que encontró, sino como lo propone  el empirista Locke que nos dice: quien azuza de halcón  tras alondras y gorriones no saca menos placer , aunque  la presa sea más  vil, que quién  lo vuela en caza de algo más  más  noble. (Trdo. Sobre el entendimiento humano. John Locke). Aunque Locke, no comparte las ideas  innatas, está seguro  de algo que: Porque  el entendimiento, como el  ojo que juzga a los objetos  sólo  su propio  mirar, no puede menos alegrarse con cuanto descubre, sin mucha pena por lo que se le escapa, puesto que lo desconoce (John Locke Trtdo. sobre el entendimiento humano. P 6). A pesar  de que las repuestas  a las preguntas  sobre la idea de Dios  en el hombre, es bastante propio del humano  seguir buscando, a pesar de que se diga que la existencia  de Dios, o el origen  de la idea de Dios en el hombre, no viene por causas externas, el hombre  no se conforma con  una explicación  subjetiva de aquella seguridad teológica  llamada fe, pues la fe  no da razón  concreta de la existencia  de algo en cuanto a razón se dice. Sin embargo,  Sto. Tomas de Aquino,  da solidez  a estas afirmación  de Sahagún, cuando  nos dice: se dice que son evidentes por si mismas aquellas cosas cuyo conocimiento  nos es connatural. (Suma teológica, cuestión 2 arto 1, Sto. Tomas de Aquino).  La génesis  de la idea de Dios en el hombre, es aún más  compleja,  ya que solo por mencionar  al filosofo Descarte, que afirma de ideas innatas, es cuestionable, que esa idea  de Dios en el hombre  sea, connatural,  en otras palabras  innatas en el  hombre. Pero como se conoce que ese origen  de la idea de Dios se puede dar por efectos como  lo dice el doctor  angélico: por cualquier  efecto puede ser demostrada su causa, porque, como  quiera que los efectos  dependen de la causa, dado el efecto, necesariamente  antes se ha dado la causa. (Sto. Tomas  de Aquino).  Ahora es posible que el buscar repuestas  sobre esa idea de Dios, sea un efecto  causado posiblemente  de Dios en el hombre.

 Finalmente sea también  un efecto de esa idea misma lo que ha hecho  que el hombre,  como dice Sahagún haga todo lo posible  por conocer a un ser perfecto haciendo que: desde sus orígenes, el ser humano haya sacralizado  determinados  objetos, tiempos  y lugares. Quizás  ahí donde se puede dar con el origen  o la génesis  de la idea de Dios en el hombre. Donde el hombre no busca, es donde él mismo dejo de buscar. Por ello es que, nos dice  Sahagún que: la idea de Dios debe de ser comprendida por sus razones  intrínsecas, sin que guarden, proporción con las  acciones y circunstancias  en que se produce. Seguramente, está búsqueda  de la génesis  de la idea de Dios,  no tiene mayor importancia, hasta alcanzar  una mentalidad,  mayor y más profunda  intelectualmente de esa idea, y por razones más  compleja se llega a  pensar, en una repuesta, tal como Sahagún  lo propone: Es un concepto  peculiar que germina con la conciencia de la persona humana  cuando ésta llega a su madurez y es capaz  de asumir conscientemente su finitud.