Ensayo sobre las cinco vías de Santo Tomas de Aquino.

 

Seminario mayor de filosofia san Luis Gonzaga.

Diócesis de Matagalpa

Alumno: Diego Rodríguez

Docente Saluma Yaro Centeno.

                    I EL ORIGEN DE LA IDEA DE DIOS EN EL HOMBRE

No es lo mismo indagar al hombre a plantearse el problema de Dios conviene distinguir desde el principio entre causas determinantes del echo y factores del origen de Dios, cuando se habla del origen del hombre no nos referimos a su aparición en las personas más bien se refiere a la idea de Dios que está sembrada en la mente y en el corazón del ser humano

No negamos que determinado acontecimientos y circunstancias diversas contribuyan a la aparición de la idea de Dios en la conciencia del hombre. Como las manifestaciones de la creación, las bendiciones la idea de Dios debe ser comprendida por sus razones intrínsecas es decir la idea de un ser absoluto ninguno de estos estados puede producir por sí mismo la idea de un ser in finito todo poderoso.

En otras palabras, el origen de la idea de Dios en el hombre no es debido a causas externas es decir la creación de todo lo que los rodea sino la idea que está en nuestros corazones que no se explica como una ilusión sino algo que está más a ya de nuestra razón.

En los diferentes monoteísmos se tenía concepción distinta de la idea de Dios, en el monoteísmo del antigua Egipto se tenía la idea de un Dios único con diferentes divinidades, mientras que en el monoteísmo Bíblico que es un Dios trascendente universal y único. En ninguno de estos casos la idea de Dios procede de factores ájenos de sentimientos religiosos, sino que aparece como una exigencia interna que la descubrimos en nuestra reflexión comunicación con Dios es una relación

Es bueno concluir que la idea de Dios, como ser se hace más bien presente ante la inteligencia por disposición natural o ideas innatas antes de ser identificados por cualquier acto debe existir en el espíritu y el corazón cierta idea de Dios.